“Cipotes” es una obra literaria impregnada de un alto grado de sentimentalismo desde su principio a fin, el cual logra captar inmediatamente la atención del lector apelando a la sensibilización. El desarrollo de la obra permite que el lector use rápidamente la imaginación y sienta como si estuviese viendo una película. Se dice que la obra literaria fue inspirada y casi como un encargo por parte de los lustrabotas que faenaban en la plaza central de Tegucigalpa cuando comenzó a trabajar en el periódico “El Cronista” de Tegucigalpa. Para Ramón Amaya Amador, un hombre de origen humilde y quizás en ciertas etapas de su vida golpeado por circunstancias similares, cuando vivía en los campos bananeros de la costa norte; no le es difícil plasmar la trama de la novela, y detallar ciertas escenas con gran realismo.
En efecto la obra cuenta el drama social, familiar y económico de una humilde familia que reside en los barrios marginales de en algún lugar de Tegucigalpa; de los cuales el padre y la madre solo se mencionan brevemente, mientras que su hijo “Folofo” y “Catica” son los personajes centrales de la obra. Es una narración de las felices y tristes vivencias de dichos personajes en ambiente lleno de desdichas y hostilidades, que hacen que dichos personajes tengan que afrontar la vida como adultos a muy corta edad.
Seudónimo de escritor “Solrackings”
Excelente aporte
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